La leyenda de Sant Jordi

¡Buenos días, idealistas!

El lunes que viene es un día muy especial en España (y no sé si en otros países también) porque es el Día del libro. En Catalunya este día es muy esperado por toda la población, ya que celebramos el día de Sant Jordi, nuestro patrón.

Tal y como cuenta la leyenda, había un dragón que aterrorizaba a un pueblo entero. La única manera de tenerlo manso era dándole de comer. Decidieron darle cada día 2 corderos, y así poder disfrutar de la tranquilidad de no tener al dragón amenazándoles de destrucción. Cuando los corderos se terminaron, mandaron a otros animales hasta que, al final, no quedó ni uno.

Así pues, se decidió que se haría un sorteo diario para elegir a qué habitante del pueblo se mandaría a la cueva del dragón y ser su manjar. Nadie se salvaba de entrar en el sorteo, por lo que llegó el día temido para la familia real. Un 23 de abril, de entre todos los nombres que había en la urna, apareció el de la princesa. El rey suplicó piedad al pueblo, prometiendo riqueza para él, pero la gente se negó.

Cuando la princesa llegó a la cueva del dragón y éste se disponía a comérsela, apareció Sant Jordi, un caballero que provenía de muy lejos. Iba sobre un cavallo blanco y llevaba un escudo dorado y una lanza.

Sant Jordi le clavó la lanza al dragón, justo en el corazón, y lo mató. De repente, de la sangre aparecieron miles de rosas rojas. Sant Jordi cogió una de ellas y se la regaló a la princesa. A su vez, la princesa le escribió un poema de amor al caballero.

Por eso, en el día de Sant Jordi los hombres regalan una rosa a las mujeres y las mujeres un libro a los hombres.

Mucho más allá de la historia, éste es un día señalado en el calendario de toda persona que adore leer. Las ciudades y los pueblos se llenan de paradas de libros y rosas, y la población entera suele salir a pasear. Es un día muy familiar.

En los colegios se preparan regalos hechos manualmente y se entregan a las familias durante el día. También van a ver las paradas de libros durante la jornada escolar y es un gran día para que dediquen un ratito de clase para leer o escuchar algún cuento. En la escuela en la que estoy trabajando, se han invitado a todos los padres y todas las madres de educación infantil para que vayan durante la tarde a contar cuentos.